Para responder a esta pregunta, primero tenemos que explicar cómo funciona el sistema de cuerpos en la Administración.
Los cuerpos son agrupaciones de funcionarios que desempeñan unas tareas similares. Y estos cuerpos pueden clasificarse en dos tipos:
– Cuerpos de administración especial. Para el ingreso en estos cuerpos es necesario estar en posesión de una titulación CONCRETA. Por ejemplo, para ser funcionario del cuerpo de ingenieros caminos, necesitas ser ingeniero de caminos. Para entrar al cuerpo de arquitectos, necesitas ser arquitecto…
– Cuerpos de administración general. Para el acceso a este tipo de cuerpos, no es necesario una titulación concreta, sino un NIVEL de titulación. Así, para el acceso a un cuerpo de administración general A1 se requiere licenciatura, ingeniería superior o grado (cualquiera), para el A2, diplomatura, ingeniería técnica o grado (cualquiera), para el C1 bachiller, y para el C2 la ESO. Un graduados o licenciado en física, puede opositar tanto a A1, A2, C1 o C2 de administración general.
Sabiendo esto, ¿por qué opositar a administración general? Por varias razones:
1º El número de oportunidades. Todas las administraciones (estatal, autonómicas, provinciales y municipales) necesitan siempre funcionarios de administración general. De administración especial también, lógicamente, pero en mucha menor medida. Y es por ello que en cualquier oferta de empleo (OPE) de cualquier administración van a salir plazas de administración general de alguna categoría (e incluso de todas ellas). Si eres psicóloga/o, y quieres opositar al cuerpo de psicólogos, podrás hacerlo, como hemos explicado, pero es poco probable que salgan plazas de psicólogo/a todos los años. Sin embargo, de administración general, es prácticamente seguro que saldrán.
2º El número de plazas. Las plazas de administración general suelen multiplicar por 10 (o incluso más) las de cualquier cuerpo de administración especial. Si en la OPE de la Generalitat salen 10 plazas de arquitectos/as, probablemente haya 100 plazas de técnicos/as de administración general, y otros tantos, o incluso más, administrativos/as o auxiliares. Los cuerpos generales son los que más plazas ofrecen.
3º Mayor probabilidad de obtener plaza. Todos los cuerpos de administración general, comparten aproximadamente el 75-80% del temario. De forma que si estudias para técnico/a de la Generalitat, tienes asegurado el 80% del temario en caso de te presentes a técnico/a del ayuntamiento de Valencia. Con lo que con un poco más de esfuerzo (estudiando la legislación local) puedes abarcar todos los cuerpos de administración general de la Generalitat y de todas las administraciones locales de la Comunidad Valenciana. No es tan extraño que un mismo opositor/a acabe aprobando varias oposiciones y consiga tener varias plazas en distintas administraciones.
4º La movilidad administrativa. Al contar los cuerpos de administración general con muchos más puestos de trabajo que los de administración especial, la movilidad es mucho más efectiva. En cualquier Conselleria de la Generalitat o concejalía de un Ayuntamiento hay puestos de administración general, con lo que puedes trabajar en medio ambiente, igualdad, obras públicas… y cambiar de puesto con cierta facilidad. En cambio, un ingeniero de caminos (Conselleria de obras públicas), tiene limitada su carrera a la movilidad exclusivamente en esa Conselleria, con un trabajo muy parecido, independientemente del órgano donde preste servicios.
5º La diversidad laboral. Como consecuencia de lo anterior, un funcionario de administración general tiene puestos de trabajo con funciones muy diferentes: gestión de recursos humanos, tramitación de expedientes de contratos, subvenciones, expropiaciones… las tareas administrativas son muchísimas, y varían en función de la Conselleria en donde se presta servicio (justicia, trabajo, hacienda, sanidad…), por lo que si algo no te gusta, es fácil cambiar de puesto hasta encontrar el que más se adecúe a tus expectativas.
Con todo ello, no os queremos desanimar a conseguir una plaza que se ajuste a vuestro perfil profesional. Si eres ingeniero agrícola, y es en lo que quieres trabajar, adelante, a por ello. Pero si el objetivo es conseguir un trabajo estable, independientemente de la administración que sea, opositar a administración general es garantía de éxito.
